Tigre logró un triunfo fundamental para recuperar la confianza de cara a los siguientes encuentros que se aproximan por el torneo local y Copa Sudamericana. El conjunto dirigido por Diego Martínez no sufrió en ningún momento del partido y pegó en el momento justo. Fue por 1 a 0, con gol de Blas Armoa.

En el inicio del partido se pudo apreciar de lo que tanto se habló en la previa, línea de 5 en el fondo conformada por Brian Leizza, Agustin Cardozo y Abel Luciatti; Martín Ortega y Martín Garay los carrileros.

Los corazones matadores se detuvieron por unos minutos en el arranque del partido porque Mateo Retegui quedó tendido en el suelo acusando una molestia, pero no fue para mayores. El delantero ingresó rápidamente al campo de juego y los aplausos bajaron desde las tribunas.

A Tigre le costaba encadenar pases seguidos producto a una sobrepoblación en la mitad de cancha. Comenzó a armarse un partido trabado y con poca profundidad.

Cuando todo era confusión e imprecisión en el equipo de Victoria, apareció Blas Armoa: tras un centro a la carrera de Martín Garay desde la izquierda, el delantero del Matador metió un testazo cruzado que dejó sin respuestas al arquero de Sarmiento. Tigre 1-0 Sarmiento en 35 minutos del primer tiempo.

Luego del tanto se notó una mejoría en los jugadores. Los volantes se soltaron, los delanteros picaban al espacio y los dirigidos por Diego Martínez se fueron al descanso dominando el último tramo de la primera parte y hasta pudiendo convertir otro gol de contragolpe.

Tigre mostró otra cara en el comienzo de la segunda mitad, más prolijo a la hora de atacar y más ordenado el bloque defensivo.

A los 9’ se produjeron dos cambios teniendo en cuenta la seguidilla de partidos. Mateo Retegui y Facundo Colidio salieron reemplazados por Alexis Castro y Tomás Badaloni.

Minutos más tarde, también salió sustituido Blas Armoa y en su lugar ingresó Gonzalo Flores. El paraguayo completó un correcto partido siendo una de las figuras.

El encuentro se encontraba planchado, los cortes eran reiterados y el fútbol del Matador se desdibujó. Aún así, el arco de Gonzalo Marinelli seguía sin ser inquietado.

Martínez decidió agotar las modificaciones con las salidas de Sebastián Prediger y Lucas Menossi para que ingresen Victor Aguilera y Aaron Molinas para tener más control en la mitad de cancha.

Tigre tuvo en sus manos la chance de ampliar el marcador con una volea de Leizza que explotó en el travesaño. El defensor volvió a su posición arrepentido de no haber podido liquidar el partido.

En el ultimo tramo el Matador sufrió más de la cuenta pero el resultado no se movió. Tigre consiguió una importantísima victoria para recuperar la confianza.

En el siguiente compromiso, los dirigidos por Diego Martínez deberán viajar a Santa Fe para enfrentarse ante Unión el domingo 16 de abril a las 14:00 horas por la fecha 12 de la Liga Profesional. Se vendrá un calendario bastante ajustado para el Matador.

(Que Pasa Web)